Educomunicación: participación ciudadana y creatividad
El Media Literacy es interesante desde el punto de vista del desarrollo de las capacidades intelectuales y creativas del individuo. Ayuda a trabajar en grupo y aporta herramientas para afrontar los media desde una perspectiva distinta, aumentando el empoderamiento de la audiencia con respecto al emisor. Como proyecto educativo me parece muy interesante y creo que debe incorporarse a los planes de estudio como asignatura en sí, o como herramienta de otras, ya que permite al alumno ser creador de su propia experiencia. Pero no creo que deba imponerse como norma a la totalidad de la población ni que deba considerarse como una vía para la revolución social como estos autores en algunos epígrafes señalan. Creo que la pasividad con la que nos educan convierte a la mayoría de los adultos en mediocres ovejas que siguen a un pastor sea cual sea, y cambiar el pastor no solucionará el problema. La ampliación de objetivos en la vida, la búsqueda de la verdad, debe estar motivada por un interés personal hacia la realidad que nos rodea. Me parece muy útil educar a los niños para que sean creativos y desarrollen su curiosidad, pero en la edad adulta incorporar la educomunicación a la sociedad como una ONG me parece un pérdida de tiempo. La idea que formulan los autores de considerar la educomunicación como una forma de dar voz a los más desfavorecidos, de cambiar el orden mundial, es, aparte de una utopía, una irrealidad. Tenemos maneras de escuchar a los que no entran dentro de los circuitos comerciales y si existe un interés por hacerlo, la persona interesada debe poner de su parte, actuar para conseguirlo. Masticar las cosas a la gente es, como digo, más de lo mismo. Tampoco estoy de acuerdo con que España sea uno de los países menos implicados en este campo. De hecho hace poco en el mes de junio se ha estrenado el corto “La excursión”, realizado por la escuela de cine infantil “El jovencito Hitchcotk” (www.vimeo.com/11078968). En las facultades existen radios amateurs que, si bien es cierto que algunas han cerrado por falta de apoyo institucional, otras funcionan fuera de los cauces legales, en España hay más de 2.300 emisoras piratas (www.elmundo.es/elmundo/2004/10/20/.../1098282138.html). No creo que hacer caminos sea la respuesta, creo que está bien trazarlos, que a los niños hay que despertarles el gusanillo de la curiosidad pero la decisión tiene que ser activa, sino no vale de nada.